¡DECEPCION! Esa es la sensación que me produce cualquiera de las tres versiones  dadas por mi presidente, que no es otro que el Sr. Monago, sobre el dinero despilfarrado en viajes por su “señoría”. El tan cacareado “barón rojo”, contestatario de su propio partido (PP.), es como todos. Yo pensaba que el hecho de haber tenido que contar con la abstención de I.U. para su investidura, le estaba haciendo tomar decisiones más sociales (aún en contra de su propio partido), pero por lo que se ve, estaba siendo demasiado benevolente y confiada. Ahora resulta, que todo era pura fachada y es como todos, que ponen sus intereses privados por encima del de sus ciudadanos.

Para colmo, cuando se le han pedido explicaciones, se ha escondido tras una serie de excusas, todas ellas increíbles

Es razonable pensar que nuestros políticos salen de nuestra sociedad y la conclusión es sencilla: Pertenecemos a una sociedad corrupta, todos nosotros y ellos porque nos representan. ¿Que haríamos nosotros en su situación? Esa es la pregunta del millón.