¡Dinero! A nuestra edad, (mas de 60), es imprescindible.Necesitamos para una buena imagen, elementos que nos den prestigio y por desgracia, eso es caro. Así que nos toca discurrir. Ejemplo: Las americanas ó blaziers, tienen un precio y si no es así, su calidad deja mucho que desear. Pero ahí entra nuestra cabeza. Las rebecas de punto, suplen ese papel. Mas vale una muy buena rebeca, que una americana regular. El quiero y no puedo, resulta de lo más vulgar. En cambio la calidad de un buen punto (y seguro que a mucho menor precio) cumplirá la función que pretendemos a la perfección. Eso si, su diseño debe ser cuidado, moderno y sobre todo, con estilo. Esto último debemos buscarlo de todas todas. Guapas ya no estaremos y debemos suplirlo con estilo y la elegancia que podamos transmitir.

Todo esto que acabamos de plantear, irá siempre acompañado de unos estupendos complementos, sobre todo el bolso”IMPRESCINDIBLE”.  Por supuesto, los hay carísimos, pero para pequeños presupuestos, hay opciones asequibles y desde luego, bonitos de verdad.

Hay tiendas low cost en las que buscando despacio, se encuentran cosas muy interesantes. Contamos en estos momentos, con diseñadores razonables e inteligentes, que piensan en todo tipo de presupuestos.

Un ejemplo claro de que el dinero no lo es todo a la hora de tener buen gusto, son nuestras políticas. No pensáis a veces ¿Quién aconseja a esta señora a la hora de elegir su vestuario? Creo que está claro, que entre sueldo y “comisiones” deben ir todas muy sueltas, pero en muchos casos, les sirve de poquito. Lo más importante, es analizarse uno mismo, llegar a conocerse de verdad y crear su propio estilo.